Tu Segunda Caída

Aún recuerdo esa noche en la que me llamaste para contarme como había sido tu día y sentí que no me querías contar algo que a pesar de estar conversando por teléfono y yo no podía ver tu cara al contarme lo sucedido ese día, yo lo sospechaba, hablabas de otras cosas y te debas vueltas en otros temas que no tenían nada que ver con lo que yo te estaba preguntando y como soy media bruja para mis cosas, rara vez mi instinto brujeril me falla, y claro, esa vez no fue la excepción, te pregunté mil veces y tu la muy cara dura me lo negaste las mil veces pero fue la vez numero mil uno que me lo dijiste, te habías metido con el papá de una apoderada del colegio de tu hijo, un anciano que quizás como será, y tu excusa –barata- fue que las otras apoderadas te habían molestado toda la noche con el anciano ese, así que cediste ‘ante sus encantos’, según para darle en gusto a las demás viejujas que asistieron a la fiesta del colegio, la diferencia entre el anciano y la tipa del ciber fue que con el viejo no fue solo un ‘piquito’, sino que uno con todo, aunque me negaste que te acostaste con el viejo –tal vez por que en ese momento no tenían viagra, jajaja- pero no sé por que pero no dudé si había sido algo mas que unos besucones. Así es que terminé contigo algo que aún no se concretaba físicamente, y tal vez no era mucho lo que te quería o tal vez si, aunque a estas alturas del partido ya no recuerdo para nada.

Mi Primer Perdón

Bueno, te perdoné tu primer engaño, tal vez por que seguía con el bichito de querer experimentar y no perder la oportunidad de obtenerlo, debo reconocer a todo esto que fui por lana y salí trasquilada, o también puede ser que fui cazadora cazada, alguien que sólo quiso probar algo nuevo, algo distinto, no jugar con la persona, sino que tan solo salir de la duda, pero al final jugué un juego que me atrapó y me ganó, me enamoré sin siquiera haberlo planeado. Aunque lógicamente nadie planea enamorarse de otra persona, indiferentemente del género que esta sea.

Tu Primera Caída

Había pasado ya buena parte de tiempo en esta “amistad” y aún no nos definíamos bien, para mi eras una “amiga muy especial” pero igual sentía celos de algunas de tus amistades más de tus amigas o relaciones lésbicas, me contaste de tu salida con la famosa Adriana, una tipa tal vez mas enrollada que ninguna otra, casada pero según ella que no quería a su marido y que estaba con él sólo por motivos monetarios, creo que eso le pasa a muchas mujeres que están casadas y prefieren la comodidad a ser felices, y eso también te incluye a ti, no se por que eligen el camino más fácil que es aguantar a alguien al que no quieren todo por no ser capaces de trabajar y prefieren la comodidad de ser mantenidas, al parecer la flojera es mas grande, pero bueno, esta tipa tenía –tal vez aún lo tenga- un ciber y pasaba todo el día conectada al pc y a ti, y ahí viene tu primera caída, saliste con ella no recuerdo donde, y te fue a dejar en su auto cerca de la micro o del metro, y según tu te quiso dar un beso en la boca, pero según tu no te dejaste, ahí viene lo de ojos que no ven, corazón que no siente.

Mi Ternura Oculta

Yo no soy ni muy romántica ni muy buena para demostrar mi cariño, por lo menos no en público, y contigo algo despertó una ternura que con pololos nunca demostré, y eso sólo aflora de mi con mis sobrinos, incluso un pololo siempre me recriminaba que por que a él no lo trataba con el amor con el que trataba a mi sobrino, pero bueno, mejor sigo contigo y empecé a tener detalles contigo que sin mi intención te comencé a conquistar inconscientemente, ya le hablabas de mi a tu círculo de amigos más íntimos y al parecer ya te proyectabas conmigo como pareja, recuerdo la noche en que te dediqué la canción de Phil Collins – A groovy kind of love, y mientras Phil cantaba yo te iba traduciendo el tema y es tan lindo ese tema que te llegó al alma te pusiste a llorar a moco tendido por que nunca nadie había hecho algo así por ti, o dedicado una canción en inglés con su respectiva molestia de traducirla, bueno ese era uno de los varios detalles que hacía para ti, y en parte eso marcó una relación con miles de canciones dedicadas de mi para ti y de ti para mi.

She Will Be Loved

Un día viendo el MTV, apareció el video de Maroon 5, She will be loved, y ese fue el comienzo de nuestra historia, ese día después de ver el video soñé contigo, y al otro día te lo conté y tu no entendías el por que relacioné ese video contigo, pensaste que era por tu pareja la española, y me hiciste una confesión que me dolió mucho, atribuiste el video a tu española como el chico del video y la mujer golpeada por su marido eras tu, eso de verdad que me dolió mucho, por que siempre he estado en contra de la violencia y encuentro de lo más bajo y maricón al hombre que golpea a su mujer, su pareja, amante, o lo que sea, pero un hombre contra una mujer, es de lo más bajo. Bueno me contaste parte de tu triste historia junto a un hombre que te golpeaba y te hacía mucho daño, y luego te expliqué la relación que en realidad le había dado yo al video con respecto a nosotras, y era que en realidad yo era el chico del video (y no tu española) y tu la señora del video, y la joven hija de la señora del video era mi péndex que en ese tiempo estaba enamorada de mi, y yo estaba como entre el medio de elegirte a ti o a ella, pero de ella hablaré mas adelante por que también influyó en parte a nuestra historia y también formaba relación al video la diferencia de edad entre una persona joven (yo) y alguien mas mayor (tu), no tenía nada que ver ni el género ni el marido abusador, pero esa parte hizo que le diera más énfasis en querer algo contigo y rescatarte de un tipo abusador y poco hombre.

Mensaje de texto

Estaba en la oficina y me llamaste en un mal momento, no recuerdo bien los hechos, sólo recuerdo que discutimos por largo rato, entre varias conversaciones por la situación laboral que me encontraba (creo que estaba con mucha pega y con el jefe encima hinchándome para variar los ovario), hasta que no aguantaste más el tira y afloje por teléfono y el hecho de que no pudiera hablar tranquilamente contigo, y me enviaste un mensaje en que me decías:

“¿Sabes por que actúo así?..... POR QUE TE AMO”

Uuuuffff, con eso me derretiste de una, pero seguí firme en mi posición de no tener ni un tipo de relación, mucho menos con una mujer, el miedo que eso me producía era demasiado, y desde ese momento siempre me decías que me amabas y ya me tratabas de MI AMOR, y cada vez que me decías que me amabas me preguntabas por que yo no te decía lo mismo, y yo insistía en que no podía decir algo o demostrar un sentimiento que no sentía, tal vez eso para ti era muy cruel de mi parte, pero no me gusta mentir y si digo algo es por que realmente lo siento.

Largas Conversas

Tus insistencias no cesaron y seguiste insistiendo en querer algo conmigo, ya la relación que teníamos de amistad comenzó a tomar otro rumbo, ya las conversaciones por chat se hacían mas que extensas, nos quedábamos chateando hasta largas horas de la madrugada, sin importar que al otro día debía volver a trabajar, primero era la sesión con tu hijo en donde me contaba de su día en el colegio, de sus compañeros, sus amigos del otro condominio (los fines de semana), de su pequeño mundo y sus aventuras, y su demostraciones de cariño, y las miles de ganas que tenía por conocerme, pero yo seguía con el miedo pero a la vez con el bichito picándome por salir de la duda y experimentar algo que mi cuerpo, mi corazón y mi mente insistían en querer probar y conocer ”lo prohibido”, entiéndase que en el plano social y mi entorno familiar.

Declaración

Recuerdo el día en el que me conecté en la casa de mi primo, por que en ese tiempo andaba de viaje y no me quedaba otra opción de conexión por que en ese tiempo no cualquiera tenía Internet y para mi fue muy incómodo por que mi primo chico estaba encima del PC viendo y leyendo todo lo que estaba haciendo y fue justo en ese momento que me declaraste tu amor, y como no podía seguir chateando tranquilamente tuve que cerrar la sesión y tu muy decidida con que yo te diera una respuesta me llamaste a mi celular, fue ahí donde me dijiste que actuabas de la forma en que lo hacías conmigo por que querías ser mi pareja, yo me quedé de una pieza, además que aún seguía con el rollo del tipo que me gustaba y fue ahí que te dediqué la canción de Kalimba - Yo no me quiero enamorar, por que de verdad que en esa etapa quería estar tranquila y tener un tiempo para mi.